lunes, 13 de julio de 2015

Perlas cultivadas - Papa Francisco en la Cárcel más peligrosa de Bolivia

Para leer el texto completo aquí.

Frases textuales del Papa Francisco,  en su visita al Centro de Rehabilitación Santa Cruz - Palmasola, Santa Cruz de la Sierra (Bolivia), la Cárcel más violenta de Bolivia, este pasado viernes 10 de Julio de 2015 - Viaje apostólico del Papa a Ecuador, Bolivia y Paraguay



La fe y la esperanza que nace del amor entregado en la cruz.

Es el llamado "pueblo prisión" por la peculiaridad del lugar.
Ubicado en Santa Cruz de la Sierra, Bolivia.
Tiene alrededor de 3000 presos. Cárcel más peligrosa del País
El dolor no es capaz de apagar la esperanza en lo más profundo del corazón.

La vida sigue brotando con fuerza en circunstancias adversas.

El que está ante ustedes es un hombre perdonado. Un hombre que fue y es salvado de sus muchos pecados.  No tengo mucho más para darles u ofrecerles, pero lo que tengo y lo que amo, sí: Jesús,  Jesucristo, la misericordia del Padre.

Él vino a mostrarnos, a hacer visible el amor que Dios tiene por nosotros. Por vosotros, por mí. Un amor activo, real. Un amor que tomó en serio la realidad de los suyos. Un amor que sana, perdona, levanta, cura. Un amor que se acerca y devuelve dignidad. Una dignidad que la podemos perder de muchas maneras y formas. Pero Jesús es un empecinado de esto: dio su vida por esto, para devolvernos la identidad perdida, para revestirnos con toda su fuerza de dignidad.


Pedro y Pablo, discípulos de Jesús también estuvieron presos. También fueron privados de la libertad. (...) Hubo algo que los sostuvo, algo que no los dejó caer en la desesperación, que no los dejó caer en la oscuridad que puede brotar del sin sentido. Y fue la oración. Fue orar. Oración personal y comunitaria. Ellos rezaron y por ellos rezaban. (...) Dos acciones que generan entre sí una red que sostiene la vida y la esperanza. Nos sostiene de la desesperanza y nos estimula a seguir caminando. Una red que va sosteniendo la vida, la de ustedes y la de sus familias (...). Eso es una red, que va llevando adelante la vida.


Porque cuando Jesús entra en la vida, uno no queda detenido en su pasado sino que comienza a mirar el presente de otra manera, con otra esperanza. Uno comienza a mirar con otros ojos su propia persona, su propia realidad. No queda anclado en lo que sucedió, sino que es capaz de llorar y encontrar ahí la fuerza para volver a empezar. Y si en algún momento estamos tristes, estamos mal, bajoneados, les invito a mirar el rostro de Jesús crucificado. En su mirada, todos podemos encontrar espacio.  Todos podemos poner junto a Él nuestras heridas, nuestros dolores, así como también nuestros errores, nuestros pecados, tantas cosas en las que nos podemos haber equivocado. En las llagas de Jesús encuentran lugar nuestras llagas. Porque todos estamos llagados, de una u otra manera. Y llevar nuestras llagas a las llagas de Jesús. ¿Para qué? Para ser curadas, lavadas, transformadas, resucitadas. El murió por vos, por mí, para darnos su mano y levantarnos. (...) Charlen con todos los que vienen a hablarles de Jesús. Jesús quiere levantaros siempre.


Esta certeza nos moviliza a trabajar por nuestra dignidad. Reclusión no es lo mismo que exclusión (...) La reclusión forma parte de un proceso de reinserción en la sociedad. Son muchos los elementos que juegan en su contra en este lugar (...):  el hacinamiento, la lentitud de la justicia, la falta de terapias ocupacionales y de políticas de rehabilitación, la violencia, la carencia de facilidades de estudios universitarios. Sin embargo, (...). Hay cosas que hoy podemos hacer. 


El sufrimiento y la privación pueden volver nuestro corazón egoísta y dar lugar a enfrentamientos, pero también tenemos la capacidad de convertirlo en ocasión de auténtica fraternidad. Ayúdense entre ustedes. No tengan miedo a ayudarse entre ustedes. El demonio busca la pelea, busca la rivalidad, la división, los bandos. No le hagan el juego. Luchen por salir adelante unidos.

Una palabra de aliento a todos los que trabajan en este Centro: Ustedes cumplen un servicio público y fundamental. Tienen una importante tarea en este proceso de reinserción:
Tarea de levantar y no rebajar; 
de dignificar y no humillar;
de animar y no afligir. 
Dejar una lógica de buenos y malos
para Pasar a una lógica centrada en ayudar a la persona.
Esta lógica de ayudar a la persona les va a salvar a ustedes de todo tipo de corrupción y mejorará las condiciones para todos.

Les pido que sigan rezando por mí, porque yo también tengo mis errores y debo hacer penitencia.

Que Dios nuestro Padre mire nuestro corazón, y que Dios nuestro Padre, que nos quiere, nos dé su fuerza, su paciencia, su ternura de Padre, nos bendiga

No hay comentarios:

Publicar un comentario